viernes, 27 de enero de 2012

¿Se repite el siglo?

Sí, esa es la pregunta. ¿Se repite el siglo? No he perdido un tornillo, no. Lo que intento decir es, ¿están volviendo a suceder los acontecimientos del siglo anterior? Estamos viviendo una gran crisis de la cual no se da salido, y mientras, crece el antisemitismo y el autoritarismo en Europa. ¿Logrará "la Merkel" evitar la consecuencia que esto acarreó hace casi cien años? Voy a intentar desarrollar el tema:
  • Hace noventa y tres años, se terminó la Gran Guerra. Los grandes Imperios austro-húngaro, alemán, otomano y ruso quedaban destruidos. Los victoriosos de la lucha, Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos, principalmente, impusieron a estos, en especial a Alemania y Austria-Hungría, un elevado pago como compensaciones de guerra. A partir de ahí, mientras los estados europeos que se vieron envueltos  en la guerra (la mayoría) se reconstruían con los fondos norteamericanos, Estados Unidos vivió su apogeo. Este periodo fue denominado "los felices años 20", en los que la población de este país pudo acceder a recursos que hasta entonces estaban destinados a unos pocos afortunados. Sin embargo, esta situación cambiaría al poco debido a la gran especulación bursátil en EUA, lo cual derivaría, en 1929, en un crack y su consiguiente depresión, que se extendería a lo largo de la década de los '30. Durante este tiempo, el pueblo germano, incapaz de pagar la deuda y culpando a los estados aliados de su situación, comenzó a apoyar a un régimen autoritario y socialista dirigido por Hitler, el cual pretendía eliminar del Estado a aquella población extranjera o que profesase cualquier religión no cristiana (en especial la judía). El ansía expansionista del régimen nazi les llevó, ante la pasividad del resto de estados occidentales, a adherirse territorios como Bohemia, Austria o Polonia. Esta última "conquista" llevó a Francia y Gran Bretaña a declarar batalla a los fascismos europeos (también el italiano), dando comienzo a la II Guerra Mundial.
    Imagen satírica y comparativa entre Orbán y Hitler
  • En la actualidad, tras una etapa de auge capitalista con la caída del comunismo soviético y, más tarde, del yugoslavo, estamos sufriendo otra crisis cíclica provocada por las hipoteca basura y las burbujas inmobiliarias, de la cual los gobiernos europeos, en general, no dan salido. Cabe destacar, quizá, la mala gestión llevada a cabo por los estados del sur de Europa (Portugal, España, Italia y Grecia), pero no por eso son los únicos países que sufren las consecuencias de la "crisis". Mientras la actual recesión sigue aumentando los despidos y la pobreza en Occidente, algunos países comienzan a tender, de nuevo, hacia el autoritarismo y el antisemitismo, como está ocurriendo en Hungría. El actual primer ministro húngaro, Viktor Orbán, de extrema derecha, ha aprobado una nueva Constitución, sin discutirla parlamentariamente. En ella apenas se menciona la palabra "república" (Hungría es, hasta ahora, una república), aunque sí se menciona repetidamente el término "Dios". Lo que más destaca en esta nueva Carta Magna son las constantes menciones sobre la historia y el destino grandioso de Hungría. Aparte de las diferentes nuevas leyes aprobadas, como la prohibición del aborto, la anulación del derecho a huelga o la criminalización de la indigencia, destaca la obligatoriedad de trabajo para los parados de larga duración, entre los cuales se hayan grupos de etnia gitana en "campos de trabajo" cerrados y vigilados. Por si fuera poco, el gobierno húngaro ha declarado "la guerra" a las fuerzas financieras, entre las que nombraron a "los judíos" como corresponsables del desastre económico global. Mientras, en Alemania, uno de cada cinco habitantes declara sentir rechazo hacia el colectivo judío. De momento, la Unión Europea encabezada por la canciller alemana Angela Merkel sólo ha cuestionado en Hungría lo referente a la competencia del Banco Central, mas todavía no se ha pronunciado acerca de los tintes antidemocráticos que están adquiriendo las leyes húngaras. 
A partir de aquí, formulo diferentes preguntas que aún no tienen respuesta: ¿Europa bloqueará a Hungría, de continuar en este camino, como ya ha hecho con Bielorrusia? ¿De ser así, qué sucederá con la pertenencia del país húngaro a la Unión Europea y a la OTAN? Siendo catastrofistas, y viendo lo acontecido en el siglo XX, ¿estamos ante una inminente III Guerra Mundial? ¿O simplemente es un capítulo más, tras el cual recuperaremos los niveles de bienestar, y Hungría recuperará un gobierno plenamente democrático? ¿Qué sucederá con el auge del antisemitismo? En resumen, ¿qué va a suceder en Europa?

No hay comentarios:

Publicar un comentario